El vademecum indígena recopila 38 medicinas tradicionales para levantar las defensas, curar la tos y los resfríos. A través de las medicinas tradicionales buscan evitar ir a una posta de salud en la Ciudad de San Ignacio de Moxos, donde ya hay dos contagios y decenas de casos sospechosos.
Ante una nueva pandemia que aún no encuentra una vacuna, el monte y la selva son protectores de los pueblos indígenas amazónicos. Sin servicios de salud, alejados de los hospitales y ante la falta de atención del gobierno, han decidido aislarse en el territorio y recurrir a prácticas de cuidado colectivo que aseguren su sobrevivencia.
Bajo esta premisa, el Territorio Indígena Multiétnico (TIM) ubicado en la Amazonía Sur del Estado Plurinacional de Bolivia lanzó el recetario “Remedios del Monte: saberes ancestrales para el cuidado colectivo territorial”. El vademecum indígena recopila 38 medicinas tradicionales para levantar defensas, curar la tos y resfríos, frenar la diarrea, bajar la fiebre, morigerar el dolor de oído o corporal, y mitigar el asma y la pulmonía.
El Presidente del Territorio Indígena Multiétnico (TIM), Don Bernardo Muiba Yuco, el día de la titulación del territorio señala que el cuidado debe ser colectivo para evitar salir del territorio.
Los indígenas aclaran continuamente que de ningún modo se intenta señalar que esta sea una estrategia para curar el Covid-19. Por el contrario, estos son remedios ancestrales para curarse con la naturaleza y evitar tener que ir a una posta de salud en la Ciudad de San Ignacio de Moxos, la ciudad más cercana donde ya hay dos contagios y decenas de casos sospechosos. Así, el uso de la medicina tradicional se convierte en una práctica política de cuidado común que permita aliviar las enfermedades de la época.
“Para vivir siempre hemos tenido que luchar. Tenemos que organizarnos y cuidarnos entre todos y todas porque es la única forma para mantenernos con vida. Debemos resguardar el territorio y quedarnos en nuestras comunidades.”
“Para vivir siempre hemos tenido que luchar. Tenemos que organizarnos y cuidarnos entre todos y todas porque es la única forma para mantenernos con vida. Debemos resguardar el territorio y quedarnos en nuestras comunidades.”
“No es la primera vez que nos vemos amenazados. Nuestros antepasados también enfrentaron epidemias y permanentemente hemos tenido que resistir al avasallamiento y explotación de nuestros territorios mientras los gobiernos nos olvidan a nuestra suerte -señala el Presidente del Territorio Indígena Multiétnico (TIM), Don Bernardo Muiba Yuco-. Para vivir siempre hemos tenido que luchar. Hoy nuevamente tenemos que organizarnos y cuidarnos entre todos y todas porque es la única forma que conocemos para mantenernos con vida. Debemos resguardar el territorio y quedarnos en nuestras comunidades. Sabemos que además de este virus enfrentamos otras necesidades. Por eso el cuidado debe ser colectivo: trabajemos el chaco, intercambiemos nuestros productos y aseguremos que nadie se quede sin comer; si hay una persona enferma ayudémosla, hay muchos males que sabemos curar con los conocimientos tradicionales y así evitar vernos obligados a salir del territorio”.
Remedios del Monte fue pensado como un cuidado colectivo que recoge la historia oral y la práctica de narrar las memorias de los antiguos. El recetario retoma el amplio conocimiento de los indígenas amazónicos sobre las plantas, animales y otros seres que habitan el monte, los ríos, las serranías y las pampas. El vademecum indígena advierte que los remedios deben usarse siempre en consulta de las personas conocedoras y reconoce los límites de la medicina tradicional en tanto existen enfermedades que deben ser tratadas por médicos profesionales.
Paulina Noza es una de las autoras de “Remedios del Monte” junto a la abogada especializada en derecho indígena Fátima Monasterio Mercado. La Presidenta de la Organización de Mujeres del TIM resalta que hay que alimentarse bien, fortalecer el cuerpo y evitar que el virus entre al territorio.
La Presidenta de la Organización de Mujeres del TIM, Paulina Noza, explica: “Para tener salud lo primero es comer bien y hacer chaco para que no falte la comida. También hay que estar fuerte y preparar el cuerpo con los remedios que conocemos. Si hay necesidad, si faltan víveres o hay una persona enferma podemos organizarnos y cuidarnos entre todos para que el virus no entre a nuestro territorio”.
De esta forma, acogiéndose a la sabiduría de los antiguos y a una larga memoria de resistencia, los pueblos de Bosque de Chimanes nutren sus estrategias de defensa de la vida y aclaran que seguirán exigiendo al Estado el cumplimiento de sus derechos.
Fátima Monasterio Mercado es abogada e investigadora de la Fundación Solón. Además, es la Coordinadora del Grupo de Trabajo Pueblos Indígenas, Autonomías y Derechos Colectivos del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).